Expertos e inversionistas dijeron a Portafolio que se requieren importantes ajustes en condiciones financieras, técnicas y de áreas.

'Offshore' en Colombia.
De acuerdo con datos de la Unidad de Planeación Minero Energética (Upme), en el país hay registrados 11 proyectos de generación eólica costa afuera, todos en fase 1, cuya capacidad de generación, según se ha informado sería de poco más de 5 gigavatios.
Con base en esto y en aras de promover la transición energética, el Gobierno anunció el lanzamiento a consulta de los pliegos para la asignación de áreas de ocupación temporal para que las compañías hagan los estudios e investigación en las zonas, que posteriormente se podrían convertir en proyectos. No obstante, este documento se ha encontrado con dudas y preocupaciones por parte de inversionistas y de los expertos.
Los pliegos a comentarios incluyen una serie de condiciones que dejarían a pocas o ninguna empresa habilitada para el proceso.
Dentro de estos se encuentran aspectos financieros, como cumplir dos de las siguientes condiciones: una calificación crediticia mínima, cupo de crédito o indicadores de estados financieros señalados por la entidad. Esta debe ser entregada por el habilitante financiero, pero lo que exponen es que los desarrolladores por su naturaleza no suelen contar con estas características.
Adicionalmente, otro punto sobre el que se ha hecho mención es la participación estatal en los proyectos. Uno de los argumentos es que dentro del borrador de pliegos no se mencionan las características de esa participación. Además esta obligación para las compañías iría en contra de la libertad de las mismas para elegir sus socios.
A este tema se suman otros, como los habilitadores técnicos. Los participantes en el proceso deberán cumplir una de dos características, la primera haber estado en al menos tres fases, ya sea estructuración, diseño, selección y contratación de proveedores, construcción o control de calidad de parques de mínimo 200 megavatios.
La segunda característica es haber estado en dos de las fases señaladas anteriormente pero con una capacidad instalada de al menos un gigavatio. Según fuentes conocedoras del proceso, la fase de diseño no se valida en todas las circunstancias, con lo que se hace más complejo cumplir las condiciones expuestas por la Agencia Nacional de Hidrocarburos y la Dirección General Marítima (Dimar).
Además de estos temas mencionados, otro que se destaca es el área delimitada recomendada por la Dimar. Esta está ubicada entre Bolívar y Atlántico, pero en estas no es donde están los mejores regímenes de viento, sino en La Guajira.
Adicionalmente, algunos de los proyectos listados en la fase 1, según información de la Upme, quedarían por fuera al no estar en las áreas delimitadas por este documento.
Conocedores del sector dijeron a Portafolio que este documento parece una extrapolación muy directa de un proceso de asignación petrolero, por lo que se desconocen las particularidades del sector y de este tipo de proyectos.
Se suma el hecho de que aún no hay términos de referencia ambientales para estos proyectos, que deben ser emitidos por parte de la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla).
Un punto importante está relacionado con la experiencia que deben certificar las empresas que se presenten al proceso. Un 20% de la ponderación en este sentido es “experiencia en tramitar satisfactoriamente la licencia o autorización ambiental de proyectos eólicos costa afuera que permita la construcción de estos”, detallan.
Los expertos consideran que el país tiene mucho potencial para el desarrollo de parques de esta naturaleza, especialmente por los buenos vientos que corren en el norte, como en La Guajira.
Las propuestas
Hay varias propuestas que se han hecho para viabilizar el desarrollo de los proyectos, especialmente a nivel financiero.
Una de las proposiciones es que se haga una subasta específica para la tecnología, que le daría una base de retribución segura que haría más ágil la financiación de estos nuevos parques de generación de energía.
Ahora bien, estos proyectos tienen como característica que el kilovatio es más costoso que el de otro tipo de fuentes. Por esto se considera que el Gobierno debería generar algún tipo de subsidio que permita que el precio no sea totalmente trasladado a los usuarios.
Así, la matriz energética podría lograr la descarbonización, como está planteado, para que a 2050 el país sea carbono neutral.
Fechas del proceso de asignación de áreas temporales
El cronograma de asignación para estos proyectos fue presentado en días pasados por las entidades, que dieron a conocer el primer proceso de otorgamiento de áreas para esta tecnología que se presenta en el país.
El primer paso es la recepción de comentarios sobre el borrador de los pliegos presentados por la Dimar y la ANH. Este estará disponible hasta el 16 de noviembre y después de esto se publicará el 4 de diciembre se presentarán los pliegos definitivos para ser consultados por las empresas interesadas.
Entre abril y mayo de 2024 se podrán hacer solicitudes de nominación de áreas que permita tener las zonas que serán revisadas para evaluar si son aptas. A renglón seguido se hará la recepción y evaluación de ofertas, con lo que en noviembre se otorgará finalmente la adjudicación de las zonas. Así, en mes once de 2024 se haría la adjudicación de las áreas.